PALMA DE MALLORCA, 23 Abr. (EUROPA PRESS) -
De este modo, la Audiencia revoca una sentencia anterior que daba la razón al propietario por el impago de las rentas y condenaba a los inquilinos a abandonar la vivienda bajo advertencia de desahucio.
Los magistrados se han apoyado en una sentencia del Tribunal Supremo y han recalcado que el IBI, a diferencia de la renta, es una cantidad indeterminada, por lo que para poder desahuciar a los inquilinos por impago, el propietario debe de comunicar a los inquilinos el precio exacto del tributo.
Finalmente, por la falta de dicha notificación previa a los arrendatarios del importe del IBI, no procede entender resuelto el contrato de arrendamiento.