Entre ellos figura el segundo paso para la eliminación total del Impuesto de Sucesiones para cónyuges, descendientes y ascendientes directos. Esta eliminación se aplicará mediante una reducción en la base imponible del impuesto de hasta 50.000 euros con lo que el 80 por ciento de los contribuyentes ya no tendrán que tributar por este concepto. Hasta ahora Madrid sólo había eliminado el impuesto de sucesiones para los hijos menores de 21 años.
Además, con la voluntad de facilitar el acceso a la vivienda se reducirá del 7 por ciento actual al 4 por ciento el tipo del Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales para las familias numerosas y se ha introducido una bonificación del 85 por ciento de las donaciones que los padres realicen a favor de sus hijos para la compra de su primera vivienda, hasta un máximo de 30.000 euros.
Con estas medidas, Engracia Hidalgo asegura que podrán beneficiarse de los beneficios fiscales más de medio millón de madrileños y generar un ahorro para los contribuyentes de 265 millones de euros anuales.