El Poder Judicial ha asegurado que la lucha contra la violencia doméstica es una prioridad y recuerda que una comisión técnica está preparando un informe sobre las penas vigentes en el actual Código Penal con vistas a posibles revisiones y adecuaciones que puedan permitir condenas más duras.
En este sentido, ya se encuentra en la fase final del trámite parlamentario la reforma de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, que, entre otras cosas, prevé la celebración de juicios por delitos de violencia doméstica en 15 días, plazo que se reduce a un máximo de dos días en caso de que se trate de faltas.
Esta modificación, que al igual que todos los cambios legales para extender los juicios rápidos podrá estar en vigor la próxima primavera, permitirá transmitir a la víctima de la violencia doméstica una mayor confianza en la Administración de Justicia.
Hay un gran número de absoluciones en esta clase de juicios debido a que el actual retraso en la celebración de los juicios conduce a que muchas víctimas acaben declinando comparecer o terminen retractándose.