Breve reseña de la obra:
La influencia del concepto americano de “la ciudad-jardín” en el continente europeo ha ocasionado la pérdida de la identidad de la urbe europea, compacta y mediterránea. El desarrollo de la tipología de vivienda familiar constituye un fenómeno que favorece la formación de la “ciudad dispersa”, es decir, un modelo urbanístico gran consumidor de recursos que se caracteriza por la indefinición de los límites entre el campo y el núcleo urbano porque las formas de vida ciudadana se diseminan por todo el territorio. En consecuencia, surge la necesidad de ordenar la construcción de las viviendas familiares emplazadas en lugares aislados de los núcleos de población existentes y desvinculadas de las explotaciones agrarias.
La presente obra analiza la normativa estatal y autonómica sobre este hecho territorial desde la perspectiva del Derecho urbanístico, examinando un concepto amplio de la vivienda familiar aislada y su evolución en las distintas leyes del suelo. Este libro se centra principalmente en el régimen jurídico de la autorización para la construcción de la vivienda familiar y aislada según la Ley valenciana 10/2004, de 9 de diciembre, del suelo no urbanizable, pues una de las principales consecuencias de esa regulación es que en los municipios recae la responsabilidad no sólo de comprobar los requisitos legales necesarios y de velar por el cumplimiento de la protección de la legalidad urbanística, sino también la competencia exclusiva para autorizar este uso edificatorio.
Así, desde un punto de vista práctico, este estudio jurídico, de fácil lectura, detalla todos los condicionantes existentes para la construcción de estas viviendas, territoriales y urbanísticos, al tiempo que presta atención a la intervención de la Administración local en el procedimiento de otorgamiento de la licencia municipal correspondiente, y a la participación de notarios y empresas suministradoras en el control del proceso de edificación.