Breve reseña de la obra:
La aportación del Tribunal Constitucional a la definición del modelo autonómico ha sido tan relevante que, con razón, se ha podido calificar a la nueva estructura territorial del Estado surgida de la Constitución de 1978 como “Estado autonómico jurisdiccional”. Aunque no deba atribuírsele en exclusiva todo el mérito, el Tribunal, desde su condición de intérprete supremo del texto constitucional, ha coadyuvado decisivamente a clarificar y a perfilar un sistema cuyas bases y fundamentos jurídicos parecían permitir, al menos en los primeros momentos, desarrollos bien dispares.
En el presente libro, a lo largo de once capítulos, se ofrece una completa y exhaustiva sistematización de la jurisprudencia constitucional sobre las diversas técnicas y mecanismos con arreglo a los cuales se ha logrado ordenar la cuestión central del nuevo modelo territorial, la del reparto y la articulación de las competencias entre el Estado y las Comunidades Autónomas. Se rinde con ello homenaje a esa trascendental contribución del Tribunal, tratando de facilitar el conocimiento de una doctrina que, decantada a lo largo de veinticinco años de actividad, sigue conservando toda su virtualidad. Un dato éste de extraordinaria importancia que debe ser permanentemente tenido bien en cuenta, máxime a la vista de nuevas propuestas de reforma de los Estatutos de Autonomía y del proclamado propósito de no obstaculizarlas siempre que se desenvuelvan dentro del vigente marco constitucional.