El curso político 2007-2008 en Italia ha venido sustancialmente marcado por el cambio de gobierno acaecido tras las elecciones generales celebradas en abril. Con la vuelta de S.Berlusconi al Ejecutivo se inicia una tercera etapa de gobierno cuyo interés inicial se ha orientado hacia la aprobación de medidas dirigidas a la gestión de la crisis económica, el incesante incremento de la inmigración, así como la preocupante situación de las basuras en la región de Campania. En el capítulo de la jurisprudencia constitucional, la cuestión regional seguirá ocupando un lugar preferente, adentrándose la Corte en la siempre ardua cuestión de la definición del sistema regional y sus claves esenciales. Por lo que se refiere al ámbito de los derechos fundamentales, brilla con luz propia la serie de decisiones en las que se sientan las bases para dotar de eficacia reforzada tanto al Convenio Europeo de Derechos Humanos como a las sentencias emanadas del Tribunal de Estrasburgo.