MADRID, 10 (EUROPA PRESS)
Según la sentencia, el Supremo rechaza el recurso de casación presentado por los condenados ratificando así la resolución de la Audiencia Provincial que correspondía a la vista oral de un juicio contra cuatro personas, dos de las cuales finalmente fueron condenadas como autoras de un delito de asesinato en grado de tentativa, concurriendo en ambas las agravantes de discriminación política y motivos ideológicos.
Como hechos probados se declaró que el día 7 de noviembre de 2010 los cuatro acusados, en unión de otra persona a quien no se identifica, apuñalaron en Valdemoro a un menor de 16 años. El chico permaneció en coma inducido varios días en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del hospital 12 de Octubre.
De esta manera, los cuatro procesados quedaron previamente y acudieron a las inmediaciones de un bar de la localidad donde sabían que se encontraba el menor. Acordaron previamente que dos de ellos acometerían al menor con armas blancas, siendo uno de ellos Andrés María, junto a otro no identificado ya que llevaba el rostro cubierto en el momento de los hechos. Los otros miembros del grupo esperarían cerca para vigilar y asegurar la huída en coche de los autores directos.
"Hacia las 21.10 de ese día los autores se aproximaron al menor cuando este salió un momento del local y, sin mediar palabra, Andrés María le asestó dos puñaladas en el abdomen mientras el otro agresor le daba una puñalada por la espalda", relata el fiscal.
Ambos agresores vestían prendas negras y llevaban la cara cubierta, si bien uno de los acompañantes del menor logró retener por unos instantes a Andrés María y descubrirle el rostro. Instantes después los dos agresores escaparon corriendo y se subieron al coche.
Con anterioridad a estos hechos, en 2009 y en el verano de 2010, el procesado, Andrés María F. J., ya se había dirigido al menor, que se define como de ideología franquista-falangista, llamándole "cerdo" o "facha de mierda". Según el fiscal, "no había ningún motivo de enemistad entre ellos, salvo la diferencia ideológica". Por su parte, los 4 procesados tienen vinculación con la extrema izquierda violenta 'antifascista', según el Ministerio Público.
Todos ellos mantenían relaciones de amistad entre sí y, en concreto, Damian y Tamara eran entonces pareja sentimental. Sin embargo, ninguno de los acusados había tenido contacto alguno con el menor agredido, salvo Andrés María, quien fue detenido el mismo día de los hechos.
